Somos llamados los centinelas del buen tequila a nivel mundial.

Casa Centinela siembra alrededor de seis millones de agaves en 2 mil hectáreas localizadas en la región de los Altos, cerca de Arandas, Jalisco.

Somos orgullosos de tener la primer fábrica de tequila de la región, y con ello conservamos nuestro antiguo proceso de tradición.

Los agaves son estrictamente supervisados y cuidados durante más de siete años, luego de eso, los jimadores cortan las pencas y recolectan las piñas. Cada día se recogen aproximadamente 4 mil de éstas y se pasan a los hornos de mampostería.

La cocción se realiza a baja temperatura durante 48 horas, esto para obtener el jugo de agave con cuerpo y abundancia en azúcares, a diferencia del que se obtiene con las técnicas modernas.

Después de este proceso, la desgarradora desmenuza el agave; el mosto, se deposita en las tinas y se fermenta durante cuatro días con levaduras exclusivas de la casa, aisladas y cultivadas en el laboratorio Centinela, que analiza la materia prima durante el proceso bajo altos estándares de calidad.

Los líquidos, son tratados en alambiques de acero inoxidable con serpentín de cobre, materiales que utilizan las mejores fábricas de bebidas destiladas.

De la doble destilación se obtiene el tequila blanco. El reposado y el añejo, se logran en 56 mil barricas de roble americano, conservadas en la cava de tequila más grande del mundo, la de Tequila Centinela.

En Centinela no solo hacemos tequila, lo custodiamos, vigilamos y protegemos.